Proyecto: Cuéntanos tu historia

Soy Concha León Portilla y tengo 66 años cumplidos. Desde hace ocho años dirijo, escribo y conduzco Enlace50, un programa de radio dedicado al tercer acto de la vida, a la tercera edad, a la vejez, o como cada quien prefiera llamarlo. La escritora Marianne Williamson le dice: “la edad de los milagros”. Yo creo que la mirada depende de cada persona; lo que sin duda es inspirador, es saber que el espíritu humano es lo único que nunca deja de crecer mientras lo cultivemos, y cultivarlo es la más emocionante travesía. Tan emocionante que produce milagros.

Enlace50 es el origen de mi pasión por el tema de la longevidad. De ahí han derivado cursos, talleres, conferencias, asesorías, participaciones en otros medios de comunicación y redes sociales. En pocas palabras, dedico mi vida profesional a la etapa vital en la que me encuentro por mi edad, y eso es el motor que agradezco todos los días. Estoy convencida de que “no es lo mismo vivir, que durar” y como cada vez vivimos más, lo que importa es aprender para saber qué hacer para vivir mejor.

El día que presenté en MVS Radio la idea de producir un programa para personas mayores, recibí un: “Sí, adelante, ¡qué bien! ¡Hazlo!… con la condición de que tú estés en el micrófono”, algo que nunca había hecho en mi carrera profesional como directora y guionista. Me lancé aterrada y, después de más de 400 programas, soy la mujer más feliz y agradecida con Alejandro Vargas por esa oportunidad que me dio y que ha cambiado mi vida. Mejor dicho, que da sentido a mi vida porque, entre muchos beneficios, es una fuente de aprendizaje indescriptible que me ha dado el privilegio de conectarme con personas de todo el mundo, apasionadas con el tema de la longevidad.

Para que tengas un panorama más claro de los cambios demográficos te comparto estas cifras: a nivel mundial, cada segundo dos personas cumplen 60 años. En México, hoy somos más mayores de 60 que menores de cinco años y, para el 2050, uno de cada cinco mexicanos será mayor de 60. En España, el 20% de la población son adultos mayores y en Japón, Corea y Singapur, uno de cada tres. La ciencia y la tecnología nos han regalado 30 años de vida sin instructivo, algo que nunca había sucedido en la historia de la humanidad. Por ello, el Foro Económico Mundial este año elevó a nivel de “macro tendencia” el tema del envejecimiento que es global.

La revolución de la longevidad exige nuevas estrategias en todos los aspectos: educación, trabajo, salud, urbanismo, diseño, tecnología, ahorro, planes de retiro, pensiones, proyectos de vida y, por supuesto, seguros de gastos médicos. La fórmula tradicional de estudias, trabajas, te retiras y te mueres unos cuantos años después es obsoleta. ¡Hoy en día podemos retirarnos a los 60 y tener 30 años por delante! Es urgente replantearnos de qué vamos a vivir y cómo, conocer los hábitos más eficientes para cuidar la salud y nuestras relaciones, y entender que el aprendizaje de por vida es indispensable porque hay que seguir vigentes.

La buena noticia es que somos muchos los interesados en aprender a crear una nueva cultura de la longevidad. En 2018 me invitaron a participar en el FB del Portal del Adulto Mayor y en el Festival del Adulto Mayor que se lleva a cabo en Ciudad de México, León, Guadalajara y, próximamente, Monterrey. Ahora vamos en la décima edición con una asistencia de más de 15 mil personas por evento.

Hace un año conocí al equipo de Koltin y quedé fascinada con su misión: ofrecer una membresía de gastos médicos que se puede adquirir hasta antes de los 84 años y que protege a las personas mayores de una manera integral. Es decir, no solamente a través del seguro sino de la asesoría con especialistas en temas estratégicos de autocuidado, y además se preocupan por crear comunidad, algo fundamental en esta etapa. Contar con un seguro de gastos médicos mayores nos cambia la vida. Era aterrador saber que a partir de los 64 años nadie nos aseguraría.

A nivel personal, te comparto que a mis 66 años me siento contenta con el camino recorrido y que vivo consciente de que cada vez queda menos por delante. Tengo tres hijos a los que adoro y dos nietos que me han hecho descubrir un amor desconocido. Tuve unos padres ejemplares que nos llenaron de cariño a mis hermanas y a mí, que se desvivieron por sus nietos dejando una huella preciosa en sus corazones y murieron trabajando hasta el último de sus días como voluntarios ayudando a niños con cáncer. Soy divorciada, la separación fue un parteaguas en mi vida. Dicen por ahí que todo pasa por algo y que el dolor nos lleva a crecer. Sin duda he crecido y, además, tuve la fortuna de reencontrarme con un novio maravilloso de mi juventud, un hombre entusiasta y amoroso con el que he aprendido a querer de una manera muy distinta, más profunda y respetuosa, más libre y divertida, y aquí seguimos el uno para el otro, listos para compartir y disfrutar la vejez y la vida.

La amistad es esencial para mí, siempre lo ha sido y con los años cada vez más. Soy muy curiosa, me encanta aprender, leer, el cine, el teatro, y nada me gusta más que viajar. Gozo la naturaleza y las caminatas con mis perros. Doy clases de narrativa en una zona marginada de la Ciudad de México desde hace 14 años; es una actividad que atesoro. Mis alumnas me hicieron maestra. Tenemos dos libros que presentamos en la FIL Guadalajara: Madera de escritoras I y II.

Hoy, los días me parecen cortos y cada vez se van más pronto. Qué lejos está ese 28 de noviembre de 2015 en que el programa de radio salió al aire por primera vez. Recuerdo el poema de José Saramago con el que cerramos la transmisión y me emociona compartirlo contigo en Mi Valedor, un espacio que apoya y cobija. Gracias también a Koltin por invitarnos a escribir parte de nuestra historia y por protegernos a las personas mayores con un concepto que nos da un horizonte de seguridad, autonomía y pertenencia.

Es hora de vencer la discriminación por la edad, de dejar de producir personas que llegan derrotadas a la vejez, de romper estereotipos y de entender que la vejez es una parte natural del ciclo de la vida en el que tenemos mucho por disfrutar y por hacer. Seamos el ejemplo para las siguientes generaciones de cómo vivir vejeces dignas y autónomas, vejeces sanas, con propósito y dueños de nuestras decisiones hasta el final.

Es tiempo de decir como Saramago:

¿Qué cuántos años tengo? ¡Qué importa eso!

¡Tengo la edad que quiero y siento!

La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso, hacer lo que deseo

sin miedo al fracaso o lo desconocido

pues tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la convicción de mis deseos.

¡Qué importa cuántos años tengo! ¡No quiero pensar en ello!

Pues unos dicen que ya soy viejo, otros “que estoy en el apogeo”,

pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice,

sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte.

Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso, para hacer lo que quiero,

para reconocer yerros viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos.

Ahora no tienen por qué decir:

¡Estás muy joven, no lo lograrás! ¡Estás muy viejo, ya no podrás!

Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma,

pero con el interés de seguir creciendo.

Tengo los años en que los sueños,

se empiezan a acariciar con los dedos, las ilusiones se convierten en esperanza.

Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada,

ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada.

y otras… es un remanso de paz, como el atardecer en la playa.

¿Qué cuántos años tengo?

No necesito marcarlos con un número,

pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos,

las lágrimas que por el camino derramé

al ver mis ilusiones truncadas valen mucho más que eso.

¡Qué importa si cumplo sesenta o más

pues lo que importa: es la edad que siento!

Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos.

Para seguir sin temor por el sendero pues

llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis anhelos.

Qué importa cuántos años tengo

o cuántos espero, si con los años que tengo aprendí a querer lo necesario

y a tomar solo lo bueno.

Gracias por leer estas palabras. Te invito a escuchar Enlace50 los sábados en el 102.5 FM y en mvsnoticias.com, y a ser parte de las personas mayores de hoy que estamos transformando la cultura de la longevidad.

¡Ser viejo está de moda!

Dra. Carmen García Peña: Directora General del Instituto Nacional de Geriatría, experta en Salud Pública con doctorado en Envejecimiento y maestría en Ciencias Médicas.