Soy cantante y comediante; en medios artÃsticos me conocen como Juan Ariel. La experiencia te da muchas cosas: con 57 años, he tenido una carrera artÃstica y he conocido culturas, estilos de vida distintos, y a polÃticos. He sido peluquero y practico masoterapia. Ofrecà conciertos; no quiero sonar pretencioso, pero acudieron más de 10,000 personas. Y ahora, miren… ¿quién lo iba a pensar? Nadie está exento de una situación de calle.
Asà ando desde 2008 porque me despojaron de mi vivienda. Yo llegué al d.f. muy grave de la tiroides; me dieron tres meses de vida. La nutrición me salvó y logré una mejor calidad de vida. Pero en ese proceso de recuperación, la familia que me rentaba la vivienda planeó quedarse con mis propiedades. Resulta que el hijo, con pistola en mano y cortando cartucho, me amenazó de muerte. Logré salvarme y sacar mis documentos, pero de todos modos me robaron mi propiedad en Cuernavaca.
Gracias a unos amigos entré al albergue Plaza del Estudiante. Ahà me enteré de Mi Valedor y me pareció una muy buena opción. La revista nos ayuda a adquirir alimento y ahorrar un dinero para poder pagar un cuarto pequeño. Eso es lo que quiero ahora. Actualmente duermo en Tláhuac, en un taller de costura donde yo cuido las máquinas. Pero no es lo mismo tener un lugar donde dormir a tener un hogar. No puedes transformar las calles en un hogar, no es lo mismo.
Mi Valedor para mà es volverme a relacionar y a encontrarme a mà mismo. Estoy tomando clases de fotografÃa y de producción de videos; por medio de ellos estoy haciendo un documental. Yo le agradezco mucho a Dios que me haya permitido conocer la vida en las calles, ahora veo a mi prójimo.
Quiero hacer mi regreso al escenario, al Teatro Metropólitan; invitar a grupos como Los Pasteles Verdes e integrantes de la Sonora Santanera. Voy a invitar a todos mis compañeros. El dÃa que lo logre, va a ser para mà un dÃa de mucha alegrÃa.