Al grito de ¡Luces, cámara, valedor! recorrimos uno de los sets de filmación más auténticos del mundo: la Ciudad de México y su área metropolitana. Acompáñanos a conocer los cines para adultos que aún operan en el Centro Histórico, así como a sus fieles parroquianos; comparte la nostalgia valedora por los autocinemas y los lobby cards; y rememora algunas de las filmaciones más icónicas, tanto nacionales como del más allá, que han cobrado vida en la plomiza y paradójica—pero siempre, siempre, cinéfila y trepidante—ciudad de Los olvidados.