Fue a los 23 cuando intentó suicidarse en la bañera del hotel más caro de la ciudad. Soñaba con exiliarse en Tahití, que por eso aprendió francés. Escuchaba “Las tumbas de la gloria” de Fito Páez, su madre al teléfono hecha un despojo de cicatrices; el cuchillo afilado, el agua caliente con sales marinas. El […]