Alejandro Peña platica la tortuosa salida de su adorado Venezuela hasta llegar, no sin fuerte temor, a México: “Vivir en un país sumido en crisis es una pesadilla. Nada tiene sentido. No hay esperanzas ni sueños; el futuro se oculta tras la neblina de la incertidumbre. La única opción es la de huir, lejos.”