Pensar en la historia de la fotografía en México es pensar casi siempre en blanco y negro. A pesar de que los insumos para hacer fotografía a color llegaron a nuestro país casi de inmediato a su invención, los altos costos de producción fueron una limitante que no permitió una rápida expansión de la técnica.
Tras varios años de investigación, se inauguró Mexichrome. Fotografía y Color en México, una revisión histórica de la fotografía a color en México, con más de 180 fotografías de más de 110 autores de México, Estados Unidos y diversos países de América Latina y Europa. La muestra abre con una breve historia de la imagen fotográfica a color en nuestro país, desde las imágenes en blanco y negro que eran coloreadas a mano con pigmentos y pinceles, y las primeras películas que registraban tonos, hasta la invención de la cámara Polaroid, las impresoras de inyección de tinta y la cámara digital. La muestra es una amplia revisión de imágenes producidas en nuestro país por una gran diversidad de autores.
Imágenes icónicas de la fotografía mexicana, como esta de Pedro Valtierra que documentó una de las primeras protestas zapatistas, y la serie de retratos “Rubias” de Andrés Carretero.
La exposición, que puedes visitar en el Museo del Palacio de Bellas Artes, está dividida en varios núcleos: Paisaje, El pasado prehispánico, Los muros pintados, Arquitectura moderna, Mercados y comercio, Religión y ceremonia, y La Bandera.
En la exposición, proyectos como “2 millones de casas para México”, de Livia Corona Benjamín, una crítica a las deficientes políticas de vivienda que resultan en espacios precarios, marginados y sin servicios a las afueras de las grandes ciudades, entre muchas otras imágenes, dan un recorrido por la producción fotográfica en territorio mexicano desde distintas prácticas y miradas.
¿Cómo podemos pensar lo contemporáneo desde la modernidad? ¿Cómo al desmontar el significado de los símbolos podemos levantar otros que sí dialoguen con nuestra realidad actual?
Vivian Maier fotografiaba su vida, se tomaba selfies y nunca compartió sus imágenes con nadie. Qué distópico suena eso en la era de las redes sociales.
Un autobús estacionado en la colonia Roma es una mediateca especializada en arte, fotografía e imagen contemporánea.